Ejercicio al aire libre con altas temperaturas: qué precauciones tomar para evitar riesgos de salud
El aumento del calor en varios países obliga a extremar cuidados al entrenar fuera de casa.
Con el inicio del calor en países como México, muchas personas retoman sus rutinas de ejercicio al aire libre, motivadas por el clima soleado y los días más largos. Sin embargo, hacer ejercicio en condiciones de calor extremo puede representar un riesgo para la salud si no se toman las precauciones necesarias. La clave está en adaptar la actividad física a las condiciones climáticas para prevenir descompensaciones.
Las altas temperaturas y la humedad pueden alterar la capacidad del cuerpo para regular su temperatura, lo que puede derivar en golpes de calor, deshidratación o incluso cuadros de insolación. Especialistas en medicina del deporte aconsejan modificar horarios y hábitos para evitar complicaciones, sobre todo en personas mayores, niños o quienes padecen enfermedades crónicas.
Cuándo y cómo ejercitarse en verano
Puede interesarte
Una de las primeras recomendaciones es evitar hacer ejercicio entre las 11 de la mañana y las 4 de la tarde, cuando el sol y el calor alcanzan su punto máximo. Las mejores horas para entrenar son al amanecer o al atardecer, cuando la temperatura es más benigna y el cuerpo puede adaptarse mejor al esfuerzo físico.
También es fundamental mantenerse hidratado antes, durante y después del entrenamiento. No se trata solo de tomar agua, sino también de reponer electrolitos, especialmente si el ejercicio es intenso o prolongado. Las bebidas deportivas pueden ser útiles, pero deben evitarse aquellas con alto contenido de azúcar o cafeína.

La ropa adecuada también puede marcar la diferencia. Los materiales livianos, transpirables y de colores claros ayudan a mantener una temperatura corporal más estable. Asimismo, usar gorra, gafas de sol y protector solar es indispensable para proteger la piel y los ojos de los rayos UV.
Puede interesarte
Por último, estar atentos a las señales del cuerpo es clave: mareos, sudor excesivo, fatiga extrema o confusión pueden ser señales de alerta. En esos casos, se recomienda detener la actividad, buscar un lugar fresco y consultar a un profesional si los síntomas persisten. Practicar deporte con responsabilidad es la mejor forma de cuidar la salud durante los meses más calurosos del año.
Comentarios
Para comentar, debés estar registrado
Por favor, iniciá sesión