Salud: Este es el condimento que le tenés que agregar a tus milanesas para que no sean tan pesadas
Un ingrediente simple puede hacer que tus comidas sean más livianas y fáciles de digerir.
Durante años, las milanesas se mantuvieron como una de las comidas favoritas en las mesas argentinas. Ya sean de carne o de pollo, su sabor, crocancia y versatilidad conquistan todos los paladares. Sin embargo, hay quienes las consideran una opción “pesada” o difícil de digerir, sobre todo si se cocinan fritas, lo cual puede afectar la salud digestiva si se consume con frecuencia.
Frente a esto, expertos en nutrición y cocineros coincidieron en un consejo sencillo que puede hacer la diferencia: agregar orégano a la preparación. Este condimento, común en la comida diaria, no solo realza el sabor, sino que también tiene propiedades digestivas que ayudan a aliviar la pesadez estomacal y a cuidar la salud intestinal.
Una aliada de la buena digestión
El orégano pertenece a la familia de las hierbas aromáticas que estimulan la producción de enzimas digestivas. De acuerdo con estudios del Instituto de Ciencias Gastronómicas de Turín, este ingrediente contiene compuestos que favorecen la digestión de grasas, ideal para platos rebozados como las milanesas, una comida que suele estar presente en muchas dietas.
Además de su valor nutricional, el orégano aporta un aroma y sabor que equilibra la grasitud de la fritura. Y si las milanesas se cocinan al horno, su presencia potencia el sabor sin necesidad de agregar más sal ni otros ingredientes pesados, promoviendo una mejor relación entre el disfrute y la salud.
En cuanto a los beneficios a largo plazo, los nutricionistas recomiendan reemplazar condimentos artificiales o salsas por hierbas naturales como el orégano, que forman parte de una alimentación saludable. Su uso frecuente puede ser un paso pequeño pero significativo hacia una mejor digestión, sin dejar de disfrutar de una buena comida.
En definitiva, incorporar este condimento no solo mejora el sabor de las milanesas, sino que también aporta un beneficio concreto para tu salud. Porque comer rico no debería estar reñido con sentirte bien después de cada bocado.
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